La naranja mecánica

¡Hola!
Esta semana he elegido como tema para mi entrada semanal una película de 1971: La naranja mecánica o A clockwork orange, de Stanley Kubrick, basada en la novela homónima de Anthony Burgess.

sacada de Google

Alex DeLarge, protagonista, el mismo de la imagen, es un delincuente juvenil que dirige una banda jóvenes marginales que busca practicar delitos donde se presentan actos de violencia provocados por ellos mismos para saciar su apetito sexual y disfrutar de la adrenalina. Los placeres de éste son: escuchar música clásica (Beethoven especialmente), el sexo, las drogas y la ultraviolencia. 

Un día esto se ve forzado a terminar por la detención de Alex, traicionado por su grupo. Para intentar salir de prisión se somete "voluntariamente" a una técnica psicológica de rehabilitación conductista experimental, el "método Ludovico". Esta técnica consiste exponerle al paciente ante imágenes violentas durante largos períodos de tiempo, estando, a su vez, bajo los efectos de las drogas. Al protagonista se le obliga a ver imágenes de horribles violaciones, agresiones y otros actos de violencia mientras sufre los efectos de las drogas, así, asociará estos efectos negativos a estas conductas. En el siguiente vídeo aparece: https://www.youtube.com/watch?v=4gZq2TxrxVo.

Esta técnica funciona, ahora es incapaz de realizar cualquier acto de violencia, o tocar a una mujer desnuda, además tampoco es capaz de oír su pieza favorita, la Novena Sinfonía de Beethoven. 

Al salir de prisión, descubre que sus padres han alquilado su habitación, por tanto, tiene que irse, y partir de este momento deambula por la ciudad encontrándose con sus viejas víctimas: el mendigo del principio llama a sus amigos y le meten una paliza, hasta que llega la polícia, que resultan ser dos de sus antiguos compañeros de delitos, quienes casi lo matan. También lo dejan tirado por el bosque, por lo que busca a dónde ir y encuentra la casa de otra de sus antiguas víctimas, quien le deja entrar a su casa al no reconocerlo. Posteriormente, lo descubre y decide vengarse, drogándole y haciéndole escuchar a Beethoven para que intente suicidarse saltando por una ventana, pero logra sobrevivir. 

Después aparece en el hospital con el ministro de Interior, quien le pide perdón por haberle realizado este tratamiento y sus efectos secundarios. 

Al final, Alex dice "definitivamente, estaba curado", mientras aparecen imágenes que él mismo se imagina que demuestran que realmente no lo estaba. 

Recomiendo fervientemente la visualización de esta película, ya que es muy entretenida y personalmente es una de mis favoritas.